domingo, 30 de noviembre de 2008

Planean asociarse por el comercio

 
 
30 Planean asociarse por el comercio

Otavalo. La Plaza de Ponchos y las calles aledañas, los fines de semana se llenan de comerciantes, quienes durante todo el día expenden sus productos. Desde artesanías en madera o plata, hasta sacos de lana, se encuentran en este espacio de ventas.

Y es que este sitio es considerado uno de los principales centros de comercio de Imbabura, pero en los últimos meses su actividad en ventas disminuyó notablemente. 
Ahora, los comerciantes, no sólo de ese lugar sino de todo el cantón, buscan la forma de salir de esa crisis. 

Desde los organismos públicos se busca una manera de lograr que los vendedores vuelvan a tener buenas ventas. Una de las estrategias es la capacitación y en los últimas semanas los artesanos recibieron temáticas sobre atención al cliente, liderazgo gerencia empresarial y técnicas de ventas. 

Pero eso no es suficiente, pues a más de la estructura de capacitación se busca trabajar con los comerciantes otavaleños en fortalecimiento de procesos asociativos

Tras la unidad

Antonio Campos, jefe de la Unidad Artesanal, dijo que lograr los procesos asociativos en Otavalo es difícil, porque muchas veces los artesanos tienen desconfianza en los cambios.



“Hay que tratar de dejar a un lado los individualismos y la desconfianza. Si logramos romper esa barrera, podremos trabajar en la cuestión  asociativa”, comentó Campos.

Y es que en Otavalo, los artesanos muchas veces trabajan sin tomar en cuenta las demandas del mercado y eso afecta a la comercialización de lo que elaboran.

Comercio

Algo de historia

La Plaza de Ponchos tiene más de cien años de funcionamiento, pero la actual estructura fue diseñada y construida en 1972 , con financiamiento del gobierno de Holanda y la supervisión del Instituto Otavaleño de Antropología.

En enero del 2000, Ecuador adoptó como moneda oficial al dólar. Esto para muchos artesanos fue un perjuicio, pues según muchos de ellos, sus empresas empezaron a quebrar y las que resistieron la transición de moneda ya no tenían las mismas ganancias que antes. 

MI OPINIÓN 
En 60 segundos
Isabel Rojas, estudiante de Economía

Alternativa de asociatividad 

La idea de la asociatividad es unirse para fines cooperativos. Las necesidades de todos los sectores crece y por esta razón, no solo los artesanos tienen que unirse, sino todos quienes se dedican a alguna actividad comercial. 

Cada vez hay menos fuentes de empleo y con la asociatividad este problema disminuirá en cierta forma, porque la unidad de los artesanos sería una forma de sobrevivir dentro del campo comercial que cada día es más competitivo. 

Además, con la asociatividad se disminuye el riesgo que una determinada empresa quiebre.
Con la unidad de los artesanos se logrará, también adquirir  nuevas destrezas, con ello se enfrenta las crisis desarrollando ventajas competitivas.

Con la unión de voluntades y objetivos comunes se obtendrán mejores resultados en el área comercial.

Entre algunas de las ventajas de la asociatividad están: competir mejor, reducir costos de producción e incrementar la elaboración de productos. Entre quienes se asocian se establecerían canales propios de mercado y comercialización. No solo en Otavalo se debe aplicar la asociatividad, sino en toda la provincia.

isavictoria_97@hotmail.com

Fuente: La Hora Imbabura

sábado, 29 de noviembre de 2008

Miseria y males afectan a los Awás

30 de Noviembre de 2008
 
 
TRADICIONES. A más de los problemas de salud y alimentación, los Awá afrontan pérdida de sus tradiciones, sus mitos y leyendas.

Por: Marco Marcelo Mafla y Edison Duván Ávalos
Carchi, Nariño, La Hora
Luz Angélica Chirán Herrera descubrió hace un año que indígenas awás de la frontera colomboecuatoriana estaban muriéndose de hambre. Fue durante uno de esos días en que dejó a un lado sus actividades de docente bilingüe en el Centro Educativo Awá, en Angostura, y se adentró en las selvas aledañas para llevarle a los indígenas medicinas y ropa. A su regreso, decidió pedir posada en una choza porque la noche le impedía seguir caminando. 

No era muy frecuente que esta mujer de 49 años realizara estas caminatas, pero anteriormente, cada vez que las hacía, regresaba a su casa con un guatín, o un conejo, o una zorra, o un ratoncito, o una sarta de sabaletas que los indígenas le regalaban como muestra de agradecimiento.

Sin embargo, en esta ocasión, en la choza donde la dejaron pasar la noche sólo le ofrecieron un plátano. “No tenían nada más que comer, estaban pasando necesidad, era una pobreza total”.

Desde entonces, Luz Angélica nota en cada una de sus salidas que la situación de los indígenas awás empeora, tanto la de aquellos que residen en las selvas del noroccidente carchense como la de los que viven en el suroccidente nariñense. De hecho, su esposo, Diógenes Taicú, promotor de salud en Angostura, explica que la pobreza ha llegado a los extremos de generar graves enfermedades como el parasitismo, la desnutrición y el paludismo. “Nosotros le explicamos a la gente las normas de aseo, pero ¿de qué sirve enseñarles a lavarse las manos antes de comer si no tienen nada que echarle al estómago?”, se pregunta este hombre de 45 años que en muchas ocasiones, con sus escasos conocimientos, ha tenido que atender partos y personas gravemente heridas o enfermas.

Lo que hace falta
La mayoría de los awás de la frontera colomboecuatoriana deben realizar en promedio un viaje de dos días para llegar a Tulcán, la ciudad más cercana. Ahí, los funcionarios del Ministerio de Salud tienen pleno conocimiento de los males que padecen. Y ya han empezado a tomar acciones. En la última brigada de salud que realizaron, del 20 al 28 de octubre en las comunidades de San Marcos y El Pailón, detectaron 12 casos de desnutrición, además de otros como parasitosis, problemas respiratorios e hipertensión arterial. Pero el médico José Castillo, epidemiólogo de la Dirección Provincial de Salud, reconoce que estos esfuerzos no representan la verdadera solución: “El problema ahí es de alimentación”.

El indígena Jesús Nastacuaz, de 48 años, lo sabe mejor que nadie. Antes sólo tenía que lanzar el anzuelo al río que pasa por su comunidad, La Guaña, para de inmediato obtener su almuerzo. Ahora cada dos meses debe realizar una caminata de siete horas hasta Chical, la cabecera parroquial, para comprar los alimentos que consumirá. “Aquí -dice mientras se pasa la mano por la parte superior de la cabeza- ya tengo hecho un hueco de tanto colgarme el canasto con la sal y los fideos. Desde que acabamos con la caza y la pesca estamos como crucificados”.

Es por eso que Emilio Orbe, presidente de la Junta Parroquial de Chical, considera que es indispensable acompañar las brigadas médicas con un proyecto económico. “Lo que realmente se necesita es que todas las autoridades unan sus esfuerzos e impulsen proyectos productivos, que capaciten a los indígenas en cultivos y en recuperación de la flora y fauna”.

La riqueza en riesgo
Luz Angélica lleva casi tres décadas educando a los niños awás en su propia lengua, un idioma que aprendió de su madre. Además, ha convivido en las profundidades de la selva con los indígenas más autóctonos, comiendo durante días únicamente chiro con ají, saliendo descalza a cazar guatín con los arcos de chonta y durmiendo a la orilla de los ríos sobre la majawa, una cobija hecha de la corteza de palma.

Esta experiencia de vida, sumada a los conocimientos pedagógicos y étnicos que obtuvo durante sus estudios superiores en Otavalo y Cali, hacen que tenga una conciencia diferente a la de los demás habitantes de la zona de la comunidad awá. De hecho, ella es una de las pocas personas que considera que los indígenas no son los que han acabado con los animales de los bosques y los peces de los ríos. “Aquí debemos tener en cuenta muchos factores, la tala indiscriminada de bosques que realizan muchas personas en el territorio awá, la contaminación de los ríos en las ciudades y las condiciones de guerra que se viven en Colombia, todo eso ha sido decisivo en la situación que padecen los indígenas actualmente”.

Por eso, asegura, no basta con que los gobiernos de Colombia y Ecuador inviertan recursos económicos en la zona. Para ella, es necesario, ante todo, que se respeten los ancestrales modos de vida de los awás. “No pueden tratarnos como si fuéramos pobres. Es cierto que no tenemos las mismas posibilidades de las demás personas, pero poseemos una enorme riqueza cultural que por nada del mundo no debe perderse”, dice mientras bebe un fuerte trago de chicha al lado de su esposo. 

Frase
"Todas las instancias ministeriales colaboran en función de los requerimientos de la población awá”. Efrén Benavides, gobernador del Carchi


Agua enferma a niños

En octubre, en el Hospital Luis G. Dávila de Tulcán fueron hospitalizados dos niños awás con deshidratación severa provocada por diarreas y vómitos. Los exámenes demostraron que tenían rotavirus positivo. 

Según explicó Hernán Yépez, director de la casa de salud, los niños fueron tratados con antibióticos y ya están fuera de peligro. “Posiblemente lo que les ocasionó esta enfermedad es que consumieron agua contaminada o alimentos mal lavados. La población awá está con una muy mala condición nutricional y eso la hace vulnerable”, manifestó el galeno.

Sus palabras fueron confirmadas por Maclovia Taicuz García, madre de uno de los niños hospitalizados. Ella, en un español que se mezclaba con su idioma nativo, explicó que el agua para el consumo la obtienen de un “chorro que cae de la montaña, de ahí sacamos con olla, así no más, frío tomamos sin calentar”.

Desnutrición los mata
El indígena awá Laureano Dinero Pay asegura que en los últimos cuatro años han muerto al menos 20 integrantes de su familia. “Tenían diarrea, vómito, ahogos, todos estaban malitos”, manifestó este indígena awá, quien teme ser el próximo en caer enfermo.

Las autoridades de salud de la provincia de Carchi explicaron que los datos entregados por Laureano no son correctos. “En verdad se ha producido el fallecimiento de personas de esa familia, pero son alrededor de 14 personas en un lapso de 15 años”, manifestó el médico Hernán Yépez.

Lo que pasa es que los indígenas awá tienen una conciencia diferente del tiempo, de modo que se confunden al tratar de hablar de meses y años. Pero, de todos modos, las autoridades de salud consideran que éste es un caso muy preocupante que debe ser intervenido de inmediato para conocer de qué murieron los integrantes de la familia Dinero Pay. La primera hipótesis que manejan es que se trató de desnutrición.

Hasta ahora, ninguno de los cadáveres ha sido sometido a una necropsia. Los indígenas awás acostumbran a enterrar a sus seres queridos en sus propias viviendas. Esto representa un riesgo porque no toman en cuenta las normas técnicas.

Carreteras, una nueva esperanza
El Gobierno Municipal de Tulcán adelanta un proyecto para abrir una carretera que comunique a las comunidades awás con la cabecera parroquial, Chical. Se trata de un trabajo en minga donde el municipio aporta la maquinaria y el trabajo técnico, y los indígenas la mano de obra. 

“Con esta carretera acercaremos a toda la comunidad awá a la civilización, a los servicios, a la educación, a la salud, para tratarlos como se merecen, como seres humanos dignos”, manifestó el alcalde, Pedro Velasco.

De igual modo, el Gobierno Provincial realizó una gran inversión con una carretera que conecta a Chical con las provincias de Imbabura y Esmeraldas. Es una obra que le servirá a los habitantes de la localidad para sacar los escasos productos que cultivan hacia el interior del país.

Por dentro
Conozca su mundo

Casas
  • Las viviendas tradiciones están cubiertas con hojas de una planta parecida al plátano. Poseen un cuarto rectangular sostenido por cuatro piedras. Tienen cocina y un espacio rodeado por cuatro palos de chonta para la leña seca y cuatro tulpas, sobre las cuales reposa una olla tiznada.

Naturaleza
  • El territorio awá tiene los últimos bosques muy húmedos de la costa ecuatoriana, que han sido reconocidos a nivel internacional como una de las áreas de más alta biodiversidad que quedan en el planeta.

Flora
  • Hay varias especies vegetales, como: chalán, caña brava, canelo, guarumo, laurel, palma, moral, sande, sangre de gallina, cascarilla, romerillo, cedro, palo fósforo, chalviande, guanguaré, caoba, chontaduro, guayacán, chapul. En el área de bosque lluvioso tropical encontramos vegetación exuberante, como: helechos gigantes, enredaderas, epifitas.

Fauna
  • Las especies animales que abundaban eran: ardilla, cusumbe, pico ligero, soche, armadillo, guatín, gato de monte, tigrillo, chucuri, luta mono, mono aullador, guanta, guatusa, rata espinosa, la guacamaya. 

viernes, 28 de noviembre de 2008

Morales acusa a la CIA de haber apoyado protestas para derrocarlo

El presidente de Bolivia, Evo Morales, ha acusado este viernes al Servicio Central de Información (CIA) estadounidense de haber apoyado la ola de protestas opositoras que se produjeron el pasado septiembre con la intención de derrocarlo , según informa la agencia estatal ABI.
"Es impresionante cómo se prepararon los racistas, los fascistas para sacarnos [del Gobierno], con participación de la CIA", ha afirmado Morales durante un acto en Cochabamba en alusión a unas protestas que el oficialismo califica de intento de "golpe de Estado civil".

El momento más crítico de las protestas se produjo en la región de Pando , donde alrededor de 20 personas resultaron muertas en lo que la comisión enviada por la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) calificó de "masacre" de campesinos.

Esta acusación de Morales supone un nuevo episodio de la tensión que ha marcado su relación con EE UU, que este año se vio agravada por la expulsión de Bolivia del embajador estadounidense, Philip Goldberg, al que acusó de conspirar contra él.

Fuente: El Pais

El sol de Cotacachi madura a la uvilla

Miguel Castillo, Red. Ibarra

Es lunes. Pequeños grupos de campesinos e indígenas ingresan al local de la microempresa Sumak Mikuy, en el centro de Cotacachi (Imbabura). Algunas personas llegan con canastos, otras con costales de yute. Todas comparten la siembra de uvilla.

Diego Guitarra, técnico agrícola de Sumak, supervisa el estado de los frutos amarillos. Luego hace cuentas y prepara el pago para los agricultores. Este año la empresa y los productores acordaron un precio invariable para la temporada: USD 1 por kilo.

Esta transacción se hace los lunes y viernes, y se ha repetido en los últimos dos años desde que el proyecto se puso en marcha.

La fortaleza es la producción de uvilla orgánica. En este proyecto participan 28 familias de varias comunas del cantón Cotacachi. Pero otros 20 grupos se preparan para la cosecha en la parroquia Peguche (Otavalo). En ambos cantones hay más de 18 hectáreas con uvilla orgánica.

Sumak Mikuy es una microempresa de la Unión de Organizaciones Campesinas e Indígenas de Cotacachi (Unorcac). La uvilla es procesada para deshidratarla y venderla enfundada o como mermelada a delicatesen y hoteles de Quito, Ibarra, Guayaquil, Cuenca, Ambato y otras urbes. La funda de 300 gramos cuesta USD 3 y la de 50 gramos, USD 1.

“Mensualmente producimos 200 kilos de uvilla deshidratada. Pero desde el 2009 aumentaremos a una tonelada y empezaremos la exportación a Europa y EE.UU.”, asegura la gerenta Verónica Acosta. Todo esto es posible con el esfuerzo diario de los campesinos e indígenas y la asistencia técnica de Sumak.

En la comuna Pieva Chupa, por ejemplo, María Salazar está feliz porque sus plantas empezarán a dar sus frutos en diciembre. “Utilizamos humus y residuos orgánicos frescos para nutrir los cultivos. Lo importante es podar y regar constantemente”.

Todas las familias tienen acceso al agua de riego y poseen huertos familiares orgánicos. La uvilla es un fruto ancestral andino al que se le atribuyen propiedades curativas por su gran contenido de vitamina C. En Perú y Colombia se la usa para tratar la inflamación de las vías urinarias y prostáticas y para prevenir el cáncer de Colon.

“Por ello, la producción orgánica es nuestra fortaleza. Los socios abonan con compost, humus de lombriz y el estiércol fresco de ganado, cuyes, gallinas y llamas”, explica Guitarra.

Los trozadores, minadores de hoja y tallo y los pájaros son los principales problemas para los cultivos. Los agricultores los combaten con insecticidas a base de ají, ajo, cebolla y alcohol. Entre las plantas de uvilla se siembran además col, remolacha, lechuga y zanahoria para tener otros ingresos.

Las semillas de uvilla, dice Guitarra, se germinan en el vivero de la Unorcac y las plántulas se siembran en los terrenos, los cuales -como requisito- debieron permanecer en reposo tres años. Luego se hacen cuatro abonaduras orgánicas y una poda para dejarle dos o tres ramas.

“La cosecha empieza a los cinco meses, dos veces por semana durante un semestre”, indica Guitarra. El ingreso semanal para los socios es de USD 200 y 300 por hectárea. Sin embargo, no todos tienen terrenos propios, muchos arriendan y contratan mano de obra diaria a USD 7.

“Tenemos fe en la uvilla porque contamos con un comprador y un valor fijos. El kilo en el mercado normal está en USD 0,50, mientras que a Sumak acordamos venderle en USD 1 por kilo”, comenta Rocío Benavides, mientras cuida sus plantas en Chilcapamba.

La teoría

Las podas son importantes para eliminar la materia verde que consumirá nutrientes del suelo innecesariamente.

La inclinación evita la acumulación del agua en las plantas y así crecen mejor. Los cortes inclinados se realizan con tijeras, con el fin de hacer una buena poda en las ramas y evitar dañar los cultivos de la uvilla.

La práctica

Se cortan hojas pequeñas y ramas torcidas y leñosas. La poda se hace al inicio del cultivo cuando la planta tiene 15 cm.

Los campesinos e indígenas hacen, por lo menos, tres podas en los cuatro primeros meses de las plantas. Luego se aplica el tutoraje para conseguir que la luz solar llegue a todas las ramas y guiar su crecimiento.

Fuente: El Comercio

Analizan Justicia Indígena

28 de Noviembre de 2008
 
 
Justicia. La Constitución Política del Estado da la potestad para que las autoridades comunales apliquen procedimientos propios para solucionar sus conflictos.

Otavalo. En el país se cumplió el primer congreso de abogados indígenas. El tema central que se analizó es el trabajo que cumplen las fiscalías indígenas en el Ecuador, pues objetaron la función que realizan. En Imbabura, esta dependencia funciona desde enero. 

Marianita Pijal, vicepresidenta del Primer Congreso de Abogados Indígenas a nivel Nacional, explicó que las fiscalías indígenas sortean los casos, criticó el hecho de que en Otavalo el fiscal no sea indígena. 

Aclaró, que para que un delegado judicial trabaje en asuntos indígenas es preciso que conozca la forma de vida y las tradiciones culturales de los pueblos y nacionalidades, por lo tanto, señaló que dentro de una comuna la asamblea es la máxima autoridad.

A lo que también se oponen los abogados kichwas son a las formas severas de administrar justicia, por ello citaron como ejemplo al pueblo shuar, donde las mujeres que son sorprendidas con otro hombre reciben el castigo máximo, que es la muerte.



El 80 por ciento de casos son de comunidades
Marco Calapaquí, fiscal de Asuntos Indígenas de Imbabura,  señaló que su trabajo se realiza en base a las responsabilidades que otorgó la Fiscalía General del Estado.

En cuanto al sorteo de los casos, argumentó  que las fiscalías no dan abasto para el índice poblacional de Otavalo, por lo que para descongestionar el trabajo es necesario prestar ayuda. 

Asimismo, dijo que desde que empezaron sus funciones se atendieron 983 casos, de los cuales el 80 por ciento corresponden a las comunidades. “Estamos haciendo nuestro trabajo, salvo que no se cumplan expectativas personales”. 

ENTRESACADO
“Existen contradicciones en la Constitución actual, en nuestra justicia no deben haber fiscales sino mediadores, porque el objetivo es remediar el mal, más no sancionarlo” 

Mariana Pijal
Vicepresidenta del Congreso de Abogados

Fuente: La Hora Imbabura

jueves, 27 de noviembre de 2008

Manjar kichwa para dioses

Veintidós comunidades kichwas retomaron el cultivo del cacao. El resultado: un chocolate gourmet que está siendo reconocido internacionalmente.
En septiembre de este año, la asociación agroartesanal Kallari colocó 60.000 barras de su chocolate gourmet en Whole Foods, el supermercado líder en alimentos naturales y orgánicos a escala mundial, que tiene alrededor de 200 sucursales solo en Estados Unidos.
Un total de 200.000 tabletas de un producto “de lujo”, por sus características de producción, aroma y sabor, llegará hasta febrero próximo al mercado norteamericano a un precio unitario de 4,99 dólares.

Esa cifra, que se reinvertirá en la producción y procesamiento del cacao criollo y el cacao trinitario, es muy significativa para Kallari. ¿La razón? Marcó el paso de la intermediación a la venta directa y, sobre todo, a la implementación de un modelo empresarial.

Antes de 2003, cuando obtuvieron el reconocimiento ministerial como asociación, los kichwas trabajaban por separado en el cultivo de cacao y vendían su producto en menos de 20 centavos la libra.

En ese año, unieron fuerzas y se embarcaron en un proyecto de agricultura sostenible; es decir, producción cacaotera de calidad, protección al ambiente y prestación de servicios a la colectividad. Actualmente, una directiva con auditores está al frente de pobladores de 22 comunidades que retomaron el cultivo de cacao que caracterizó a los kichwas de las parroquias Pano, Tálag, Ahuano y Puerto Misahuallí en Napo, durante la época colonial.

Ventas internacionales
Si bien el precio de la pepa de oro sigue alto en relación al año anterior cuando la tonelada se cotizó a 1.600 dólares en la Bolsa de Nueva York, Kallari tiene otra ventaja: su marca está respaldada por dos certificaciones, una orgánica y otra de Rainforest Alliance, que aseguran su calidad y su reconocimiento internacional.

Luis Felipe Duchicela, director regional de Rainforest Alliance, explica que su sello establece vínculos en la cadena de producción, fomenta el apoyo de los consumidores a prácticas sostenibles y crea una etiqueta reconocible en 2.000 corporaciones internacionales, entre las que están Whole Foods o Wal Mart.

El proceso de obtención de ambos sellos arrancó con cambios locales. En 2003, las fincas asociadas se empeñaron en mejorar sus suelos; dos años más tarde, invirtieron en tecnología y preparación de 60 capacitadores y 400 socios. ¿Los resultados? Más del 30 por ciento de las 2.000 hectáreas está apto para cultivo orgánico y 800 nuevos socios se incorporan desde este mes a Kallari.

Los 400 socios fundadores, en cambio, aprendieron a escoger, secar y fermentar los granos preservando las propiedades antioxidantes del chocolate, su contenido de potasio y su calidad gourmet.

En números gruesos 100.000 dólares se destinaron para insumos agrícolas para la obtención de cacao de calidad en las 2.000 hectáreas, dice Diego Grefa, coordinador general de Kallari. Por ese valor, hubo un agregado: “Se aprendió a diversificar la oferta para los riesgos del mercado”.

El modelo empresarial de esta asociación kichwa abarca cuatro frentes: la producción de chocolates gourmet, la comercialización de cacao orgánico a Europa, la venta de artesanías y la administración de una cafetería en plena zona comercial de Quito, en La Mariscal.

Arrancar con fuerza
En honor a su nombre, que significa arrancar con fuerza, Kallari se esforzó desde 2003 en el mejoramiento de tierras para producir cacao de calidad. Por eso, sus pepas de oro se abrieron camino en Europa, principalmente en Suiza.

En 2007, no obstante, la hija del fundador y director ejecutivo de las granjas Applegate, Nora McDonnell, visitó la zona como parte de un paseo escolar. Ese fue el antecedente para que arranque la relación comercial entre Kallari y Stephen McDonnell, quien a través de Applegate impulsó la creación de Kallari Project.

Según Fausto Moncayo, gerente de Ecuatoriana de Chocolates, McDonnell fue el filántropo que colaboró en la creación de Kallari Project que integra a la Asociación Kallari y a esa fábrica, que es la responsable de elaborar la pasta de chocolate bajo normas de calidad INEN.

Con el proyecto, además, se posibilitó la entrada al mercado internacional. Para Diego Grefa, coordinador general de Kallari, su asociación tiene luz verde para comercializar el chocolate gourmet en el resto del mundo; por eso, estudia el mercado europeo para abrirse paso.

En el caso de Estados Unidos, Kallari se apoyó en el convenio entre Rainforest Alliance y Whole Foods firmado en 2007 para que su chocolate comparta un espacio con productos orgánicos de África o Asia en las perchas del gigante de los supermercados.

La estrategia de mercadeo de las tabletas de chocolate kichwa de 70 gramos, de 70 hasta 85 por ciento cacao, está por ahora en manos del supermercado estadounidense que es el que establece el pedido de las cantidades del producto, la presentación al consumidor y las campañas de publicidad en medios tradicionales y no tradicionales.

Para Grefa, la experiencia es positiva desde lo comercial y, sobre todo, lo cultural porque “estamos defendiendo nuestra identidad como en el pasado y afrontando los retos económicos del presente para heredar un mejor futuro a nuestros hijos”.

Fuente: Vistazo 11/28/2008

Medellín abrió las puertas a la Feria de la Innovación

Geovanny Tipanluisa. Enviado a Medellín 

Matizada por una llovizna que cayó sobre toda Medellín, ayer comenzó la Feria de la Innovación Social organizada por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal). El objetivo del evento es premiar a las iniciativas sociales más importantes que benefician a la gente pobre. 

En los patios de la Universidad de Antioquia, ubicada en pleno centro de la urbe, se exponen 12 trabajos finalistas de ocho países. Entre estos se encuentran dos de Ecuador. El primero es la Red de Estructuras Financieras Locales Alternativas (Refla), que abarca a 21 bancos comunales del Austro. 

El otro es el proyecto Randimpak, impulsado por indígenas del centro del país. Vestida con anaco, chal rojo y alpargatas (típicos de las comunidades de Chimborazo), María Valente llegó a Colombia para representar a esta última iniciativa. En uno de los stand, Valente explica sobre la idea que se inició hace seis años.   

Junto a ella está Narcisa Guarquila. Ella nació en Pindilig, en Azogues, Cañar. Desde 1997, gerencia la Cooperativa de Ahorro y Crédito San Juan de Pindilig. En ese año apenas eran tres, pero se denominaban cajas de ahorro. Luego de 11 años  se organizaron mejor hasta conformar la Refla, que abarca a 21 entidades.

A su vez, Juan Aguilar viajó desde Otavalo para exponer su iniciativa ganadora en el 2007: Manejo y tratamiento de aguas residuales con lenteja acuática, lechuguín y totora. Laura López, secretaria de la Comisión Cepal elogió esa iniciativa. “Es ejemplo para todos. Hoy tenemos el orgullo de que esté  aquí”. 

Entre tanto, la cita de Medellín será hasta el viernes. Ese día a las 17:00 se premiará al ganador, con USD 30 000. Por el primero puesto compiten Argentina, Belice, Brasil, Chile, Colombia, Cuba, Ecuador y Santa Lucía. Presentan ideas  para mejorar la salud, nutrición, conservación del medioambiente, capacidad de generar ingresos, programas de juventud y responsabilidad social.


Fuente: El Comercio 11/27/2008

miércoles, 26 de noviembre de 2008

KITU RAYMIPI RUNA TUSHUI PUNCHA




Día de la Música Andina en el Kitu Raymi
Este Viernes 28 de Noviembre se llevará a cabo el día de la Música Andina, con la participación de TUPAY de Bolivia, WILLIAM LUNA del Perú, Los 4 del Altiplano de Ecuador festejando sus 30 años de vida artística, PUEBLO NUEVO, ARPERUS, entre otros, el festival se llevará a cabo en POMASQUI en el Estadio Las Tolas a partir de las 11H00.


lunes, 24 de noviembre de 2008

Auki Tituaña: “El proyecto nació manoseado”

25 de Noviembre de 2008
 
 
La explotación que se ha hecho por 500 años no ha dado resultado. Hay que debatir la propuesta públicamente, aseguró Tituaña

GUAYAQUIL.
EL Gobierno ha sido poco inteligente para tratar el tema minero, dijo el alcalde de Cotacachi, Auki Tituaña. Afirmo que hay gente interesada en el proyecto que impulsa el Ejecutivo. El alcalde mantuvo el siguiente diálogo con el Diario La Hora.

¿Que piensa de la ley de minería que se analiza en la Comisión Legislativa?
Ley nació manoseada y el escenario no ha cambiado nada. Creo que la propuesta del movimiento indígena sigue vigente para hacer un debate público que transparente el proceso.

¿Quien ha manoseado el proyecto?
El Gobierno, las transnacionales y las cámaras de la minería que tienen intereses de ganar al máximo en perjuicio de nuestros territorios.

¿Usted fue invitado a la elaboración de la ley?
No.

La ley se elaboró en el escritorio de las empresas transnacionales por lo que no hay ninguna garantía de que se sirva al país.

¿Qué alternativa propone?
Sentarnos a conversar públicamente ante los ojos del país o se proponga una mediación, pues así como el Gobierno llama a Francia por el tema de los contratos con Brasil, acudamos a una mediación internacional para que las tesis se conozcan.

Apoyan consulta
Dominic Channer, principal de la minera Aurelian en Ecuador, defendió la exigencia de las comunidades de hacer una consulta previa cuando se vaya a desarrollar actividad minera y de informar sobre las técnicas que se utilizan. Además, reiteró que el potencial minero del Ecuador es grande básicamente en lo que se refiere a oro, plata y cobre.

Auki Tituaña 
Algunos datos

• Ha ejercido la alcaldía de Cotacachi
• Estudió en la Universidad Central.
• Estudió economía en Cuba con una beca.
• Allí hizo su alfabetización política.
• Su vida está llena de símbolos; en su oficina luce una wipala.
• En la pared muestra dos fotos: la del Che y la de Fidel Castro.
• Es primer Alcalde Indígena en el Ecuador.
• Es integrante del movimiento indigenista.
• La ciudad que gobierna tiene más de 41 mil habitantes.